Descripción
Se podría decir que el primer cuchillo táctico fue usado en el ejército por la infantería, llamado
«Cuchillo Bayoneta» cuyos orígenes lo ubican en la Región Gala de Bayona, donde se utilizaron
colocados en la boca de un arma de fuego, se caracterizaban por presentar un tamaño más largo que
el de las actuales, entre 35 y 40 cm, con corte triangular y desprovistas de cualquier tipo de filo. Es decir,
que su única misión era la de clavar o pinchar.
La evolución de las bayonetas fue pareja a la de las armas de fuego y a la de la propia estrategia militar.
De este modo, en el S XIX surgieron así las primeras bayonetas con filo, incluso algunas con doble filo,
por lo que estas armas blancas ya no sólo servían para clavar o pinchar, sino también para cortar, tanto
a los enemigos como a determinada vegetación, hojas o pequeñas ramas.
Estas Bayonetas han ido dando lugar a los cuchillos de «combate» pasando del mundo estrictamente de las
fuerzas de defensa, como el ejército o policía, al mundo de la supervivencia, con el nombre de Cuchillo
Táctico, donde las personas que están en contacto con situaciones extremas o aventureros que se exponen
a riesgos de vida, los usan debido a su gran calidad y versatilidad.
Cuchillo Táctico hecho artesanalmente en acero 1095. Hoja de un sólo filo con mango de madera
hecho a mano con relieve para un mejor agarre y espiga a la vista, tiene punzón para romper cristales y
poder llevar una reserva de cordino siempre necesario para situaciones improvistas. Funda Kidex cosida
a mano en color negro con enganche para el cinturón.